jueves, 20 de noviembre de 2008

Escuela Florencio Sanchéz, un ejemplo de integración a pesar de la adversidad


A cuarenta y cinco minutos de la ciudad de Córdoba sobre la ruta provincial N° 111, se encuentra la Escuela Florencio Sanchéz dentro la comunidad de El Gateado. Cercana a Villa Retiro, alberga a ciento diez niños, de los cuales el 50 por ciento son de nacionalidad boliviana. Sus padres llegaron desde Bolivia para trabajar en los campos que rodean la escuela.
Desde la institución se trabaja día a día en fomentar los valores y las semejanzas que unen a los chicos. Este gesto de integración se ve opacado por las múltiples carencias a las que tienen que hacer frente los habitantes de esta pequeña comunidad.

En este informe periodístico, compuesto por dos partes, intentamos reflejar la realidad cotidiana de los habitantes de El Gateado.*



*Producción especial realizada por Juan Bellver e Ivana Viano para la Expo Cup 2008 (Colegio Universitario de Periodismo y Locución Obispo Trejo y Sanabria ).

La Casa de Mister Hughes, fundador del barrio inglés

Por Ivana Viano*
En el actual barrio Pueyrredón, antiguamente denominado barrio Inglés, se encuentra la casona donde vivió Arturo “Mister” Hughes, quién convirtió las barrancas en un asentamiento poblacional para los empleados del ferrocarril. Residió en ella desde 1907 hasta su muerte en 1922. Luego de esto, continúan habitando la vivienda sus familiares. A principios de este siglo es vendida sin poder ser declarada patrimonio histórico.
A principios del siglo veinte, la casa ocupaba toda la manzana (Roma, Cochabamba, General Deheza y Charcas). Contaba con jardines, glorietas, huerta, caballeriza y gallinero. Sobresalía entremedio de los desolados terrenos, a pesar de ser de un estilo americano sin demasiadas ornamentaciones. La impactante casona perteneció durante muchos años a la familia Hughes, tres generaciones crecieron en ella.

Imposibilidad de preservar

En el año 2000, los Hughes presentaron diversas peticiones a los ediles de turno para que convirtieran la vivienda en un museo municipal. Con los meses las expectativas decayeron y propusieron que se colocara un monumento en la plazoleta de la calle Potosí que se llamaba Arturo Hughes. Hoy, la plaza ya no existe y sólo se conserva una placa sobre los muros de la casa.

Frente a las negativas municipales, en el año 2002 los familiares la alquilan a una empresa de informática. Finalmente, en el año 2005 debido a las deudas de los inquilinos y la imposibilidad de seguirla manteniendo deciden venderla.

“Los propietarios le construyen un muro perimetral pero la consideran una reliquia, conservan los cuadros con las fotos de la construcción. Según ellos de noche se escuchan voces y pasos, aseguran que el alma de Mister Hughes anda por ahí”, comentó Tomás Hughes, nieto de uno de los hermanos de Arturo Hughes.

La historia de una gran familia
Arturo Hughes vino a la Argentina en 1875 junto a sus padres, Tomás Federico Hughes y Margaret Kelly, y su hermano, Federico. La familia de origen escocés se traslada a nuestro país, ya que flamante Observatorio Astronómico de Córdoba requiere la experiencia como físico del padre de Arturo.

Se hospedan en las viviendas de barrio Alberdi, ubicadas sobre calle Deán Funes, que el gobierno de Córdoba les otorga. “En la zona se asentaron los Olmos, los Bialet, los Hughes, los Otero y los Richardson, esas familias constituyeron lo que se llamó la esquina de los gringos”, recordó Tomás Hughes.

Al pasar los años, los hermanos Hughes consiguieron empleos en los ferrocarriles. “Ellos nunca tenían trabajo de obreros, como descendientes de ingleses tenían cargos altos, aunque supieran menos que un obrero. Al igual que todo hijo de inglés consiguieron puestos en las empresas inglesas”, dijo Hughes.

Creación del barrio
Arturo junto a su hermano observan día a día los terrenos del actual barrio Pueyrredón y ven en ellos la posibilidad de construir un gran hogar para los obreros inmigrantes. “Eran campos, montes desolados, retirados del centro y se les ocurre crear un barrio entre las calles Bulnes, Viamonte, Patria y Rincón. Crean la Sociedad Arturo Hughes y Compañía formada junto a tres personas más: Aurelia López de Fernández, hija de Augusto López fundador de General Paz, Manuel Ordóñez y Jorge Krug”, contó Tomás.

En 1914, la Compañía se disuelve, Arturo Hughes se hace cargo de los terrenos, así como también de las deudas contraídas por sus socios. “Los Hughes se encargan del loteo público, de limpiar y desmalezar las barrancas que eran bastante pronunciadas. Luego de ello comienzan a vender a quienes quisieran construir su casa, sobretodo a los empleados del ferrocarril. Luego de 1918 la mayoría de los habitantes eran inmigrantes: armenios, italianos, ucranianos y polacos”, agregó el familiar.

Arturo se casa con Catherine Ross Hughes, a pesar de llevar el mismo apellido no eran parientes, viviendo en barrio Alberdi. Al nacer su primer hijo se mudan al Boulevar Unión (hoy 24 de septiembre) para finalmente trasladarse a Roma 1272, última morada de ambos.

De barrio Inglés a Pueyrredón
En 1922, Arturo muere y su hermano Federico comienza a impulsar la instalación de sedes sociales (como el Club Armenio, la Sagrada Familia, Hospital Tránsito Cáceres de Allende) para poblar la zona. “El organizaba y daba las ideas después quien correspondiera buscaba su gente para crear e ir construyendo”, resumió Tomás.

En 1940 el barrio deja de llamarse Inglés para ser Pueyrredón. “En los tiempos de Perón cuando despide a los ingleses y estatiza los ferrocarriles, se decide con el gobierno de Córdoba cambiar el nombre a Pueyrredón. Nadie reconoció a Hughes ser el fundador del barrio, nunca le pusieron su nombre a una calle y desapareció la plazoleta. Algunos me han dicho que el problema es contra los ingleses, no hay que generalizar”, aseguró Tomás Hughes.

Foto Arriba : La casona de los Hughes en 1911, después de una copiosa nevada. Gentileza Flia. Hughes
Foto Abajo: La vivienda en el año 2003. Gentileza Flia. Hughes

*Nota publicada en la Revista La 24